Tarta de la abuela casera

Cómo hacer la tarta de la abuela

Hoy te presento un clásico de la repostería tradicional por diversos motivos que voy a explicar a continuación. Hablamos de la famosa tarta de la abuela que lleva décadas entre los postres más cocinados y no me extraña.

La tarta de la abuela es muy sencilla de preparar, se hace con ingredientes muy accesibles y por último, está deliciosa. Es difícil encontrar un postre que sea a la vez vistoso, fácil de preparar y guste a todo el mundo, pero la tarta de la abuela reúne todas esas condiciones.

No hace tanto tiempo, cuando la cocina no estaba tan de moda como ahora, la tarta de la abuela era la estrella de muchas meriendas de cumpleaños. Ahora se compran todo tipo de tartas, hay pastelerías que incluso te hacen una tarta en la que la parte superior es una foto que les lleves. No sé bien cómo lo hacen, pero quién puede resistirse a algo así.

En cualquier caso, si preferís una opción más tradicional, os ofrezco la posibilidad de preparar esta deliciosa tarta de la abuela. En caso de que la vayan a comer niños, utiliza una crema pastelera normal y corriente en vez de la de café, tendremos esa pega solucionada.

En Cocina Familiar intentamos mantener vivas las recetas tradicionales y como hoy estamos con un postre, quiero hablaros de unos cuantos postres caseros tradicionales que tengo publicados. Si hablamos de pastas tradicionales, diría que las rosquillas son una de las más comunes y dentro de ellas, existen variantes siendo la más común las rosquillas de anís.

Luego tenemos otros sabores como las rosquillas de limón y otras formas que no son las redondeadas, como las rosquillas de pueblo. Esta receta es de Aldeanueva de Ebro, el pueblo donde vivo, y tiene siglos de antigüedad.

Y hablando de Aldeanueva, otro postre muy típico de aquí, son los hormigos con arrope. Los hormigos son una mezcla de harina, agua y otros ingredientes, que dan como resultado una especie de flan insípido, que precisa del arrope, que es mosto de vino muy reducido, para darle todo el sabor.

Tampoco pueden faltar los buñuelos entre los postres tradicionales y la receta base digamos que es la de los buñuelos de viento. Luego se pueden rellenar, como por ejemplo en los buñuelos rellenos de crema de queso.

Otra que es parecida a los buñuelos, es la de profiteroles rellenos de crema. La masa es bastante similar y son unos bocados muy populares, que también suelen rellenarse con nata montada. Y para finalizar esta sección, quiero meter aquí la leche frita, los coquitos caseros y las torrijas. No se puede entender la repostería española sin estos dos deliciosos postres.

Si hablamos de postres tradicionales, no podemos dejar de lado los bizcochos de ninguna forma. En cada región de España, se hace uno diferente y entre ellos quiero destacar 3: la bica gallega, el bizcocho maimón de Salamanca y la sobada tradicional de La Rioja.

Y para finalizar, no podemos olvidarnos de los clásicos postres de cuchara. El flan de huevo, el arroz con leche y las natillas caseras. No hay restaurante que no tenga alguno de ellos en los postres del menú del día, aunque habitualmente suelen estar los 3. Son económicos, deliciosos y muy fáciles de preparar en grandes cantidades.

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