- Galletas de mantequilla caseras
Fondant de colores
Decoraciones de pastelería
Azúcar glas
- Materiales necesarios:
Diferentes cortapastas
Rodillo de cocina
Pincel de silicona y agua
Cómo hacer las galletas de mantequillaAunque ya habás podido ver el vídeo para hacer las galletas, te dejo aquí enlazada la receta completa por si necesitas revisarla. Ponemos la capa base de fondantPoner una fina capa de azúcar glass sobre la superficie de trabajo. El azúcar glass impedirá que el fondant se quede pegado al mármol. Pasar también con las manos, un poco de azúcar por el rodillo, sin excederse. Amasar el fondant con las manos para ablandarlo y extenderlo con el rodillo (si es regulable, mucho mejor). Cuando hayas extendido la masa del color que quieras trabajar, corta una porción con el mismo cortapastas que hayas cortado las galletas. Unta con un pincel la galleta con un poquito de agua y coloca el fondant sobre la galleta. Así se prepara una base de color para cada una de las galletas que vas a decorar. Decoramos con finura las galletasCuando tengas todas las galletas cubiertas con una primera capa de fondant, ya puedes hacer las decoraciones que más te gusten. Para decorar fondant sobre fontant, lo que mejor me funciona es tener un papel absorbente o paño de cocina mojado en agua e ir cortando con el cortapastas con expulsor, tocar con el fondant cortado este papel y depositar la forma con el expulsor encima del de la base de fondant de cada galleta. Así no es necesario tocar las formitas de fondant y quedan perfectas. Se puede terminar con corazones de azúcar o perlas de colores. El pegamento para todas estas piezas es un pincel mojado en agua porque la base de estas decoraciones es el azúcar y así se pega con mucha facilidad. Consejos y trucos para trabajar el fondantGuarda el fondant extendido para cortar formas más pequeñas y así no tendrás que extenderlo tantas veces. Los recortes de fondant se pueden amasar y utilizar de nuevo. Los colores se pueden mezclar, siempre añadiendo al color claro porciones del color oscuro hasta obtener el color deseado, nunca al revés. El fondant sólo puede tocar el agua por la parte que lo quieras pegar. Si se moja, no tiene remedio. Siempre que trabajes la masa, frótate las manos con un poco de azúcar glass o maizena y evitarás que se te pegue (yo siempre uso azúcar glass). Si se te mancha de azúcar algún color, pásale un paño seco hasta que no se aprecie a simple vista. Lo mejor es usar muy poquito azúcar en la superficie de trabajo para evitar estos «pequeños accidentes». Todos los materiales deben estar siempre completamente secos. Cuanto más fino trabajes el fondant, menos empalagosa resulta la galleta. Una vez hayas preparado todas las galletas, las dejas una al lado de otra en una superficie plana. Jamás apiladas porque el fondant fresco se te quedaría marcado con la forma de la galleta de encima y no queda bonito. Esto los sé porque me pasó a mi y aprendí la lección. Deja las galletas un día al aire y luego ya puedes guardarlas en una caja de lata. También puedes guardarlas en bolsitas de celofán individuales porque tenemos la costumbre de elegir admirando una a una con la manos. No te olvides de que son comida y que debe manipularse lo menos posible.
Calorías: 260kcal